No se ven en todas las bodas, pero cada vez son más comunes. Los arcos de flores son un elemento decorativo al alza en bodas y todo tipo de celebraciones, aunque son más propias de los enlaces. Y sobre todo triunfan porque son muy fotogénicos. En un mundo donde cada vez cobran más importancia la imagen y las redes sociales, tener un elemento diferenciador, que haga de tu foto las más admirada y comentada por todos, no es un elemento nada desdeñable.
Los hemos visto también en algunas de las bodas más chic, como la de Paz Padilla y Juan Vidal en Zahara de los Atunes, como marco de la imagen que subieron a Instagram. Y es que, “la foto”, aquella que luego ocupará probablemente un lugar prominente en el salón, queda mucho mejor si va acompañada de un arco de flores.
Ahora bien, ¿cuántos tipos de arcos hay? Tantas como imaginación tiene el ser humano, que es como decir infinitos. Varían en su forma, color, estilo o tamaño y algunos encajan mejor que otros con determinados lugares o épocas del año. Os contamos algunos de los más comunes, por si os sirven como idea para el día más elegante de vuestras vidas.
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Arco de flores con base de alambre. Queda muy bonito, especialmente en bodas en aire libre.
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Arco de flores con ramas. Es el que queda más natural, y puede ser tremendamente elegante
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Arco de flores con bambú. Para darle un toque exótico a la boda
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Arco de flores con madera. Sin duda el más trabajoso, pero muy visual
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Arco de flores con girasoles. Especial para bodas de otoño.